¡Aquí Miriam de nuevo!
Hoy quiero compartir con vosotros mi experiencia en el vieje que hicimos algunos internos de la life-house a Mineapolis la semana pasada, con motivo de una conferencia provida que se organizó allí.
Hubo diferentes charlas, entre ellas la del father Frank y Joe Schneider, en las que nos aconsejaban sobre sidewalk counselin, y explicaban como había en realidad que hacerlo.
Pero a parte de todos los consejos o tips, hubo una cosa que me gusto más: el ambiente que se respiraba, la emoción e importancia que ponían en la causa, la pasión y esfuerzo dedicados a salvar vidas humanas. Eso es algo, que quieras que no, te motiva para seguir adelante cuando ya no sabes ni para que lo intentas, ya que muchas mujeres siguen queriendo abortar y no consigues cambiar su decisión.
Por eso, estoy encantada de encontrar personas por el mundo, con los mismos intereses que yo. Pero no unos intereses cualquiera, sino que uno tan importante como el de salvar la vida de un bebé y la vida de una mujer, e incluso, de una familia. No desesperes, no eres la unica persona en el mundo intentándolo, no tiremos a la basura el trabajo echo por otros hasta ahora. ¡Juntos podemos!
Hoy quiero compartir con vosotros mi experiencia en el vieje que hicimos algunos internos de la life-house a Mineapolis la semana pasada, con motivo de una conferencia provida que se organizó allí.
Hubo diferentes charlas, entre ellas la del father Frank y Joe Schneider, en las que nos aconsejaban sobre sidewalk counselin, y explicaban como había en realidad que hacerlo.
Pero a parte de todos los consejos o tips, hubo una cosa que me gusto más: el ambiente que se respiraba, la emoción e importancia que ponían en la causa, la pasión y esfuerzo dedicados a salvar vidas humanas. Eso es algo, que quieras que no, te motiva para seguir adelante cuando ya no sabes ni para que lo intentas, ya que muchas mujeres siguen queriendo abortar y no consigues cambiar su decisión.
Por eso, estoy encantada de encontrar personas por el mundo, con los mismos intereses que yo. Pero no unos intereses cualquiera, sino que uno tan importante como el de salvar la vida de un bebé y la vida de una mujer, e incluso, de una familia. No desesperes, no eres la unica persona en el mundo intentándolo, no tiremos a la basura el trabajo echo por otros hasta ahora. ¡Juntos podemos!
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